Un pianista callejero se mantiene inmutable mientras toca «Eternal Flame» cual orquesta del titanic mientras todo el barco de hunde. En este caso lo que le rodeaba no era agua, sino una ola de manifestantes. Algunos huyendo y otros tantos haciendo frente con piedras a los uniformados en patruyas. Lo retuits ya se cuentan por miles, y los «me gusta» por decenas de miles, al tiempo que recibe cientos de mensajes mostrando asombro por la inalterabilidad del artista y sus acompañantes.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *